Nada se compara con el sentimiento de saber que hay un hijo en camino. A pesar de las cosas menos tiernas - desde los malestares del embarazo hasta la rebeldía de la adolescencia - siempre serán nuestros chiquitines.

Por eso cuando se acerca la llegada de un bebé, empezamos a soñar con cosas como su sonrisa, su mirada y por supuesto, su habitación (más de esto en un minuto).

¿Qué mamá no sueña con una habitación que parezca de cuentos de hadas?

Cada familia tiene sus propios gustos. La de decoración de ese espacio tan especial puede cambiar de acuerdo a:

- La región
- Las costumbres
- El estilo de los papás
- El presupuesto

Además de lo anterior, hay un factor adicional: Los papás.

Si fuera por ellos, la habitación del bebé tendría play station y una nevera llena de cervezas.

Así que para esas mamás que aman la decoración, vamos a darles la mano con unas tendencias.

Las 5 tendencias en 2018 para decorar la habitación de un bebé:

Blanco y Negro:

Los tiempos de cuartos coloridos quedaron atrás. Si ya tenías pintadas las paredes de rosado para tu princesa, no me odies.

La culpa es de los Suecos. Sí, y de los noruegos y los finlandeses.

El estilo escandinavo está marcando la parada en decoración y diseño. Pero no es arbitrario, esos vikingos tienen muy buen gusto.

Usa principalmente blanco y refuérzalo con acentos negros en elementos muy específicos.

Texturas Agradables al Tacto:

La habitación del bebé debe ser cálida y agradable.

Elementos peludos (faux-fur, peluche o pieles) contrastan con la dureza propia del mobiliario (la madera y los metales de la cuna y los muebles).

Otra opción son elementos más "rústicos" como el yute o la lana tejida, que generan esa sensación de hecho a mano que nos gusta.

Acentos de Color:

En el punto 1 hablamos de la tendencia a usar blanco y negro.Pero nadie quiere un cuarto monocromático y aburrido.

Para usar uno o dos (por favor, no más que eso!) elementos que tengan color y le den dinamismo al espacio.

Un tapete o unos cojines, un mueble pequeño con cierto color pueden ser ese toque vivo que necesita la habitación.

Naturaleza:

Así vivamos en el corazón de la ciudad, la naturaleza (o imágenes que nos recuerden la naturaleza) siempre son una buena idea.

Un papel de colgadura con arboles en lugar de nubes, un cojín con imágenes de hojas o flores, y por supuesto alguna planta de verdad.

Muebles Retro:

Saca del depósito ese mueble viejo de tu abuela. Mándalo a pintar y estarás a la moda.

Los muebles de líneas simples y de formas sencillas en colores naturales complementan muy bien la decoración de la habitación de tu bebé.